RESEÑA: Emma

 

… “Una mujer soltera, con medios de subsistencia precarios, seguramente sería ridícula y enojosa; pero una mujer soltera y rica siempre es respetable, y puede ser tan agradable como cualquier otra persona.” ... 

Cuantas cosas nos dice este fragmento de Emma, de la gran y dulce Jane Austen. 

Dejad que situe primero la obra en el contexto en que nació, en plena alta burguesía agraria inglesa del siglo XIX, una clase social nacida de la revolución agraria y que hasta entonces era minoritaria y empezó a ganar importancia. 

En general la obra de Austen se caracteriza por describir con precisión la sociedad rural georgiana, olvidándose de los cambios que ofrecía la modernidad que en aquellos momentos estaba asomándose. 

Y ahora hablemos de la mujer. Austen aboga en sus novelas por una educación liberal para la mujer, alejada de los estereotipos de la época, ser mujer florero, dulce, con buenos modales y una cultura justa para poder encontrar un marido lo más ajustado a su posición social. Ella consideraba que la falta de buen juicio en una mujer conlleva un gran riesgo para la elección de un futuro favorable.

Sus libros están llenos de mensajes instructivos, del tipo no hace falta casarse y si lo haces que sea sensatamente. 

 … “La naturaleza humana tiene buena predisposición para quines se encuentran en situaciones interesantes; de una persona joven, tanto si se casa como si se muere, puede estar segura que hablarán de ella con amabilidad.” ...

Esta burla a los talentos de la mujer para cazar marido es especialmente abundante en Emma, donde la protagonista, joven e inmadura pero llena de buena disposición, convencida de su superioridad social e intelectual y excesivamente vanidosa, decide no casarse nunca, y a la vez se dedica a la tarea de casar a los demás. Creyéndose conocedora de los sentimientos de todos los que la envuelven, no se da cuenta que las personas son mucho más complejas, y malinterpreta el romance puesto que el amor, al final, todo lo vence. 

… “Absolutamente, queridísima Harriet, absolutamente: haces justo lo que tenías que haber hecho. Mientras aún tuvieses ni que fuese la más pequeña duda, yo tenía de ocultar mis sentimientos, pero ahora que estás tan completamente decidida te doy mi aprobación sin reservas. Estimada Harriet, esto me produce mucha alegría. Me habría entristecido mucho perder tu amistad, y ésto es lo que habría pasado si te huvieses casado con el Sr. Martin.” ...

La forma que tiene Austen de poner en su sitio a la protagonista es de una delicadeza preciosa, con una candidez aparente que aporta una especie de experiencia ficticia. 

Buscaba en sus personajes que el lector se sintiera, de alguna manera, identificado con ellos. Por ésto habitualmente sus novelas cuentan con numerosas referencias personales. En esta concretamente, habla de la población de Bath como ciudad de aguas termales para la burguesía o del internado donde ella estudió con la Sra. Goddard. Tiene una enorme facilidad para retratar los lugares y situaciones que pueden ser comunes a todos los lectores, y aunque sean de la época que sean, o estén en cualquier lugar del mundo, son capaces de verse en la campiña inglesa, andando de una casa a otra, embarrándose los bajos del vestido y cubriéndose del sol con un sombrero.

… “Sí, es muy poco agraciado, sin duda. Francamente muy poco agraciado; ahora bien, esto no es nada comparado con su falta de refinamiento. No tenía derecho a esperar gran cosa, y no esperaba gran cosa; pero no tenía ni idea que seria tan tosco, tan completamente privado de distinción.” ...

El escritor y crítico literario, Pietro Citati afirmó que Austen, con esta novela, conocía todos los secretos de la realidad. No sé yo si de toda, puesto que seguramente la visión de la mujer pobre y trabajadora distaba mucho de la realidad de Jane Austin, pero sí que creo como él, que retrata perfectamente a la mujer burguesa inglesa. 

… “Está llena de salud, y con una altura y un peso de lo más justos; y esta figura suya, tan firme, tan derecha. No es tan solo la frescor de su rostro que tiene un aire saludable, sino también su forma de moverlo, su cabeza, su mirada. A veces oimos decir que una criatura es "la salud en persona"; para mi, Emma siempre me ha parecido la personificación adulta de la salud. Toda ella es encantadora ¿no le parece Sr. Knightley?” ...

Fue Sir Walter Scott quien dió un empujón a la obra de Austen gracias a su favorable reseña de Emma:  "Esa joven dama tiene un talento para describir las relaciones de sentimientos y personajes de la vida ordinaria, lo cual es para mí lo más maravilloso con lo que alguna vez me haya encontrado".

Llegaron a compararla con Shakespeare, y suscitó varias críticas positivas de la mano de Lionel Trilling, Eduard Said, Walter Scott y Rudyard Kipling, y también muchas negativas como las de Charlotte Brontë o Marc Twain. Lo importante es que no dejaba indiferente.

Una novela creada para el entretenimiento, con un trasfondo de crítica social profundo. Y unos preciosos personajes, con los que Jane Austen ha sido muy benevolente. 

Imprescindible para aquellos lectores que busquen sensibilidad, educación desmedida y pasada de moda, y que deseen tomar el té con sus vecinos, en uno de los salones de una mansión de la campiña inglesa, y hablando de la naturaleza humana jugando a cartas una tarde después de cenar.

Título: Emma

Autor: Jane Austen

Editorial: Adesiara Editorial

Idioma original: inglés

Idioma traducción: catalán

Traductor: Alba Dedeu

Páginas:  608

Año publicación original: 1815

Año esta edición: 2014